Por: Cesar Peláez / Prensa Mindeportes
Con apenas 13 años de edad, una dulce sonrisa en su rostro y un brillo característico en sus ojos, como vislumbrando el futuro que le espera, Daniela Díaz Osorio se resalta en los XXII Juegos Deportivos Nacionales Eje Cafetero 2023.
Con una historia de vida digna de admirar, Daniela ha sabido hacer frente a las dificultades personales y hoy, gracias al deporte, ha logrado sobreponerse, con una fortaleza mental y física inigualable. “Para mí el patinaje artístico ha sido, en parte, una salvación, ya que me ha ayudado mucho a sentirme feliz. He encontrado personas muy significativas para mí, a las que considero una familia”, señaló.
Esta joven atleta, que comenzó en el mundo del deporte a los 6 años y que sueña con estudiar medicina, es un ejemplo no solo para su delegación, sino para todos los atletas, voluntarios y periodistas que la han conocido en medio de estos Juegos Nacionales. Lamentablemente, Daniela perdió a su madre en agosto de este año, un duro golpe del destino, que lejos de derrumbarla, la llenó de motivos, ganas y determinación para perseguir el sueño de ser la mejor en patinaje artístico, en la modalidad de figuras y danza.
Justamente, en las competencias de esta disciplina, que se desarrollan en Manizales, la joven deportista le rindió un sentido homenaje a la mujer que hace 13 años y 8 meses la trajo a la vida. El pasado sábado, 11 de noviembre, en medio de su presentación en la modalidad de danza, el uniforme de Daniela llevaba un detalle tan especial como emotivo: una enorme foto del rostro de su madre.
Sin duda, una de las muestras de amor más grandes que en su corta vida ha experimentado. “Gracias, mamá”, fue la frase con la que Daniela, completamente emocionada, cerró su participación. Las lágrimas no se hicieron esperar, en un momento realmente mágico en el Coliseo Universidad de Caldas.
“Mamá era una persona increíble, muy alegre y que siempre estaba dispuesta a ayudar a los demás. Ella tenía un muy buen corazón. La fuerza la saco por mi familia y por hacerlos sentir orgullosos y yo sentirme bien. También por mi mamá porque ella siempre me apoyó en este deporte. ¡Ella es, sin duda, mi mayor inspiración en esto!”, relató una Daniela que, a pesar de su corta edad, tiene muy claro lo que quiere en su vida.
SUS ENTRENADORES, UN PILAR FUNDAMENTAL
Adriana Pachón, entrenadora de Daniela y quien la conoce como pocos, con la voz entrecortada, no se ahorró un solo elogio al hablar de su pupila. “Es una hija más. Es una niña muy expresiva, tierna, dedicada y con mucho talento. Ella llegó a nosotros a los 6 años, en un vacacional, y se quedó hasta hoy día. Estamos muy orgullosos de ella porque siempre que se para a entrenar o a la pista, da todo lo que tiene dentro de su corazón. ¡Es un ejemplo para muchos y nos inspira!”, manifestó.
Por su parte, José Daniel Taborda, también entrenador y acompañante de Daniela, habló del futuro. “Ella tiene muchos sueños que se han venido fortaleciendo con el pasar de los años. Los Juegos Nacionales eran una parte muy importante para Daniela y para Olga, su mamá. Queremos proyectarla a cuatro años, que todo sea parte de un proceso de alta motivación y de mucho trabajo”.
