La organización del LIX Campeonato Mundial de patinaje artístico ha dispuesto de un cómodo sitio adyacente al Pabellón Olímpico Municipal, para desarrollar lo que han llamado “El Village”, una carpa gigante y blanca que sirve de escenario para una especie de feria, donde se encuentran los mejores proveedores del mundo en implementos para este deportes, así como un gran restaurante, el sitio de descanso de los voluntarios y la sala de comunicaciones exclusiva para que los deportistas puedan conversar con sus familias en los países de origen.
En este lugar y en un sitio estratégico, la Federación Colombiana de Patinaje ha instalado también su ‘stand’ para promocionar a nuestro país y especialmente a Cali como sede de los LX Campeonatos mundiales de patinaje artístico, que se desarrollarán en septiembre del 2015 en suelo azucarero.
El sitio se ha convertido en el más concurrido por deportistas, dirigentes, entrenadores, padres de familia y habitantes de Reus, pues en él se vive y se siente la alegría propia de nuestro país, además de disfrutar de la belleza de nuestra flores y echarse uno que otro pasito tun tun, como para que todo el mundo se vaya ‘metiendo en el cuento’ de lo que será la fiesta deportiva en la ‘capital mundial de la salsa’.
El propio alcalde de la ciudad, Carles Pellicer Punyed, el consejero de deportes Sebastia Domenech Bosch, y el presidente de la Federación Española, Carmelo Paniagua, no se aguantaron las ganas de pasar por este pedacito de suelo colombiano y tomarse la foto con el sombrero vueltia’o característico de nuestro país, y que se ha convertido casi que en pieza del uniforme deportivo de las delegaciones nacionales.
El director de eventos de la Fedepatín, José Acevedo, destacó el entusiasmo de los asistentes para llegar el año venidero a suelo colombiano. “Trajimos piezas que ya hacen parte del paquete publicitario de nuestro Mundial Cali 2015, pero además llegamos con rosas colombianas, dulces típicos, café colombiano, videos promocionales y mucha, mucha salsa… pero lo que más nos ha gustado es que todos los que pasan, se toman la foto con nuestros sombreros… es muy chévere sentir que la gente de otros países quiere ir a nuestra casa, la percepción del país en Europa ya es otra y el deporte ha contribuido mucho en eso”, dijo el directivo.
